Después de 20 años, este entrenamiento sigue estando un paso adelante de la obsolescencia.
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El problema es que pareciera que ellos tienen un amor por el step casi hasta la muerte. David Mesirow, con treinta años en la industria del fitness y creador de Beam me dijo que la idea detrás del ejercicio sigue siendo la misma de cuando se estrenó. “Es un programa grandioso porque estás usando tu propio peso corporal. Y puedes usarlo en una clase completa de cardio, en un circuito o en una clase intercalada. Y es divertido”, comenta. Sin embargo, agrega: el paso del tiempo no ha sido amable con el step: “Gin creó algo grandioso, pero la industria lo destruyó”.
Lo que él quiere decir es que algunos instructores, sobre-entusiastas, han acelerado la música a un peligroso nivel de gran cantidad de beats por minuto y han complicado la coreografía para mantener felices a los “duro de matar” fans (ellos incluidos) mientras abandonan las clases introductorias. En otras palabras, están enseñando para los convertidos.
Mientras Mesirow se quejaba, Small estaba en la habitación de al lado impartiendo otro seminario sobre cómo enseñar step, donde ella enfrentaba esos asuntos. “Incluso, yo siento la presión de enseñar más rápido”, admite ante el grupo. “Pero tengo que ser fuerte y saber que estoy haciendo lo correcto”.
Para ella, eso también significa hacer sonar los tambores para una continua educación de los instructores de step. A pesar de que Miller (53), pasó más de una década viajando por el mundo promoviendo el step a través de conferencias y workshops para profesionales, ahora ha bajado su perfil considerablemente y se retiró del circuito de las convenciones. Reebok University, la división educativa de la compañía, se ha disuelto. Small dice que ella ha dirigido a personas que enseñaban sin ningún tipo de entrenamiento formal, con resultados desastrosos.
De Miller, no se escuchará ninguna queja. Ella desarrolló el programa después de una lesión de rodilla. (El doctor le recomendó subir y bajar sobre un cajón de leche como rehabilitación. Miller decidió que un poco de música mejoraría la experiencia y voilá, la instructora de aerobics tenía una nueva idea para presentar a sus clientes). En California, el 15 de agosto pasado, celebró la evolución del step a lo largo de los últimos 20 años en una clase en la que participaron 200 personas y donde se registró todo el progreso de este programa que revolucionó la industria: desde el básico subo-subo bajo-bajo hasta las más desafiantes y bailadas coreografías.
Y ella permanece increíblemente orgullosa de su bebé por haber adquirido éste el status de “gym staple” (producto básico, de primera necesidad). “Ha sido integrado en casi todas las áreas del fitness. Ha sido usado en yoga y tai chi. La gente lo usa como un banco de levante de pesas”, Miller resalta. Pero ella se lamenta que los lineamientos de esta práctica hayan sido deliberadamente abusados y que los instructores estén demasiado enfocados en los alumnos de la primera fila en lugar de la gente que realmente más lo necesita. “Me gustaría para el step que sea tan universal como lo fue en sus principios”, comenta.
Si así fuese, Miller estaría complacida de echar una mirada a una de las clases de Harold Sanco en el gimnasio Results. Sanco, director de fitness grupal de la cadena, tiene una relación especial con el step. Ambos comenzaron en la industria en 1989 y él pronto fue premiado en competiciones nacionales de step al demostrar los más atractivos trabajos de piernas. Todavía enseña step 5 días a la semana y se vanagloria por la devota concurrencia que busca sus clases, incluyendo a Elaine Grant, de 42 años, quien acredita que el step la ayudó a bajar 45 kilos. “Espero seguir haciendo step hasta que me muera”, asegura.
Pero incluso Sanco piensa que hay poca probabilidad de que el step recobre la popularidad de sus primeros años visto y considerando el crecimiento que ha tenido el Yoga, Pilates, Spinning, Zumba, entre otros. Y además, esto puede ser lo mejor para la salud de los clientes. “Tu no puedes hacer step todos los días si estás yendo al gimnasio 5 días a la semana. Se necesita mezclarlo con otras actividades”, dice.
Lo que el Step verdaderamente necesita para sobrevivir puede ser la regla que Sanco enseña a cada uno de sus principiantes: Nunca pares de moverte. Si los profesores dedicados al step pudieran entender cómo innovar pero no alienar, el step no comenzaría una etapa de descenso.
Lo que él quiere decir es que algunos instructores, sobre-entusiastas, han acelerado la música a un peligroso nivel de gran cantidad de beats por minuto y han complicado la coreografía para mantener felices a los “duro de matar” fans (ellos incluidos) mientras abandonan las clases introductorias. En otras palabras, están enseñando para los convertidos.
Mientras Mesirow se quejaba, Small estaba en la habitación de al lado impartiendo otro seminario sobre cómo enseñar step, donde ella enfrentaba esos asuntos. “Incluso, yo siento la presión de enseñar más rápido”, admite ante el grupo. “Pero tengo que ser fuerte y saber que estoy haciendo lo correcto”.
Para ella, eso también significa hacer sonar los tambores para una continua educación de los instructores de step. A pesar de que Miller (53), pasó más de una década viajando por el mundo promoviendo el step a través de conferencias y workshops para profesionales, ahora ha bajado su perfil considerablemente y se retiró del circuito de las convenciones. Reebok University, la división educativa de la compañía, se ha disuelto. Small dice que ella ha dirigido a personas que enseñaban sin ningún tipo de entrenamiento formal, con resultados desastrosos.
De Miller, no se escuchará ninguna queja. Ella desarrolló el programa después de una lesión de rodilla. (El doctor le recomendó subir y bajar sobre un cajón de leche como rehabilitación. Miller decidió que un poco de música mejoraría la experiencia y voilá, la instructora de aerobics tenía una nueva idea para presentar a sus clientes). En California, el 15 de agosto pasado, celebró la evolución del step a lo largo de los últimos 20 años en una clase en la que participaron 200 personas y donde se registró todo el progreso de este programa que revolucionó la industria: desde el básico subo-subo bajo-bajo hasta las más desafiantes y bailadas coreografías.
Y ella permanece increíblemente orgullosa de su bebé por haber adquirido éste el status de “gym staple” (producto básico, de primera necesidad). “Ha sido integrado en casi todas las áreas del fitness. Ha sido usado en yoga y tai chi. La gente lo usa como un banco de levante de pesas”, Miller resalta. Pero ella se lamenta que los lineamientos de esta práctica hayan sido deliberadamente abusados y que los instructores estén demasiado enfocados en los alumnos de la primera fila en lugar de la gente que realmente más lo necesita. “Me gustaría para el step que sea tan universal como lo fue en sus principios”, comenta.
Si así fuese, Miller estaría complacida de echar una mirada a una de las clases de Harold Sanco en el gimnasio Results. Sanco, director de fitness grupal de la cadena, tiene una relación especial con el step. Ambos comenzaron en la industria en 1989 y él pronto fue premiado en competiciones nacionales de step al demostrar los más atractivos trabajos de piernas. Todavía enseña step 5 días a la semana y se vanagloria por la devota concurrencia que busca sus clases, incluyendo a Elaine Grant, de 42 años, quien acredita que el step la ayudó a bajar 45 kilos. “Espero seguir haciendo step hasta que me muera”, asegura.
Pero incluso Sanco piensa que hay poca probabilidad de que el step recobre la popularidad de sus primeros años visto y considerando el crecimiento que ha tenido el Yoga, Pilates, Spinning, Zumba, entre otros. Y además, esto puede ser lo mejor para la salud de los clientes. “Tu no puedes hacer step todos los días si estás yendo al gimnasio 5 días a la semana. Se necesita mezclarlo con otras actividades”, dice.
Lo que el Step verdaderamente necesita para sobrevivir puede ser la regla que Sanco enseña a cada uno de sus principiantes: Nunca pares de moverte. Si los profesores dedicados al step pudieran entender cómo innovar pero no alienar, el step no comenzaría una etapa de descenso.
Autor: Vicky Hallet
The Washington Post. 25 Agosto 2009.
Traducción: Ma. Eugenia Deltrozzo para Step Vivo.
Traducción: Ma. Eugenia Deltrozzo para Step Vivo.
Articulo Original: click aqui
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